En medio del fuego y la devastación que azotan a California, el Templo de Los Ángeles permanece como un faro de paz y esperanza. Así como las llamas pueden intentar consumirlo todo, en nuestra vida el adversario busca destruir lo que más valoramos. Pero el evangelio de Jesucristo nos recuerda que, incluso en la adversidad, podemos encontrar refugio y fortaleza en Su obra. Él nos promete que la luz siempre vencerá a la oscuridad, y que ninguna oposición podrá apagar la verdad eterna.
En medio del fuego y la devastación que azotan a California, el Templo de Los Ángeles permanece como un faro de paz y esperanza. Así como las llamas pueden intentar consumirlo todo, en nuestra vida el adversario busca destruir lo que más valoramos. Pero el evangelio de Jesucristo nos recuerda que, incluso en la adversidad, podemos encontrar refugio y fortaleza en Su obra. Él nos promete que la luz siempre vencerá a la oscuridad, y que ninguna oposición podrá apagar la verdad eterna.